La pérdida de calor por ventilación se refiere al calor que se escapa al aire libre al ventilar el edificio. Esto también incluye las pérdidas en las que el calor se escapa sin control a través de fugas en la envoltura del edificio. Estas fugas incluyen las juntas de ventanas y puertas.
Los humanos y los animales liberan constantemente dióxido de carbono en el aire de los edificios, por lo que esta cantidad debe reducirse mediante una ventilación adecuada. Por lo tanto, el aire interior utilizado debe ser sustituido regularmente por aire exterior fresco. Además, el uso de los edificios, por ejemplo para lavar o cocinar, causa un aumento de la humedad. En el caso de los edificios insuficientemente ventilados, esto puede conducir a la introducción de humedad en los componentes del edificio y por lo tanto también al crecimiento de moho. Por estas razones, siempre es necesaria una ventilación suficiente en los edificios. Si durante la estación fría la temperatura exterior es inferior a la interior, la ventilación provoca un cierto consumo de energía, ya que el aire fresco frío del edificio debe calentarse. Por esta razón, las pérdidas de calor de ventilación deben considerarse además de las pérdidas de calor de transmisiónal diseñar el sistema de calefacción.
Las pérdidas de calor por ventilación de un edificio dependen de numerosos factores. En ello influyen los hábitos de ventilación de los usuarios, la forma del edificio, la estanqueidad de la envoltura del edificio y cualquier sistema de ventilación existente, pero también la diferencia de temperatura entre el aire interior del edificio y el aire exterior, la velocidad o la dirección del viento. Los usuarios pueden reducir las pérdidas de calor de la ventilación mediante la llamada ventilación por impulso, es decir, abriendo las ventanas de par en par durante un corto período de tiempo. Así, un rápido cambio del aire de la habitación tiene lugar exactamente en el momento requerido. Si, por otro lado, las ventanas sólo se abren un poco más, el intercambio de aire tarda más tiempo, lo que significa que las habitaciones pueden enfriarse. Desde el punto de vista constructivo, las pérdidas de calor de la ventilación pueden reducirse aumentando la estanqueidad del aire, por lo que también hay reglamentos en la Ordenanza de Ahorro de Energía a este respecto. Combinando un sistema de ventilación con la recuperación de calor, las pérdidas de calor por ventilación pueden reducirse aún más.
Pérdida de calor por ventilación
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